La aproximación a un estudio riguroso del contexto en el que la vida de las personas se ven repercutidas por efecto de la crisis climática apunta a la necesidad de un diseño metodológico específico. De tal manera, disponer de una estrategia de análisis que cuente con herramientas eficaces, concretas y manejables se convierte en una premisa sine qua non el aborde de cualquier medida de mitigación contra los impactos del CC sobre la población se tornaría infructuosa.

De forma generalizada, hasta ahora, el acercamiento a los impactos del CC se ha venido haciendo desde una perspectiva medioambiental casi exclusivamente. La dimensión humana ha ido apareciendo tímidamente, fundamentalmente en lo que respecta a la afectación que en la salud de la población tienen los impactos del CC. Trascendiendo esta óptica, desde esta Guía, pretendemos recoger e incluir iniciativas que transversalmente incorporen el prisma humano con un carácter sistémico.

Entendiendo que los efectos del CC repercuten no exclusivamente sobre el espacio que habitamos, sobre nuestra salud, sino además, sobre todos los aspectos que conforman la manera en que vivimos en sociedad, sobre cómo nos comportamos, sobre cómo nos conformamos como personas, sobre nuestra identidad individual, con el espacio, con el resto de la comunidad… la aspiración de este apartado de la Guía es redimensionar y traer a primer plano las esferas en que el CC afecta a la vida es imprescindible. Esta es la clave que marca este Eje de la Guía: sumar otros aspectos de la vida de las personas que se han venido señalando de forma difusa en el marco del CC.

En suma los criterios que tejen la estrategia de análisis que aquí se muestran basculan sobre una metodología específica de afectación del CC sobre las personas que da claves para incorporar la información pertinente, e inevitablemente cambiante, en una matriz de vulnerabilidad a plasmar en un mapa de vulnerabilidad adaptado a cada uno de los territorios sobre los que intervenir urbanística o territorialmente.

Los elementos que sustancian esta estrategia (indicadores de vulnerabilidad, dimensiones de impacto, grupos de incidencia) se apuntan a continuación como ámbitos en los que centrar la mirada, entendiendo que no son los únicos ni la dimensión de esta Guía permite ahondar mucho más allá de señalar los previsiblemente más afectados, su grado de afectación más inmediata y la conexión o flujos entre dimensiones, personas e impactos.

Por último se incorpora una serie de medidas y propuestas encaminadas a señalar a modo de esbozo posibles líneas de actuación a incorporar en los planes de ordenación así como las posibles derivas que pueden suponer en relación a la vida de las personas y su afectación por los efectos del CC.

Figura 5. Esquema Estrategia de Análisis. Elaboración propia

META 1

Dotar de una metodología específica adaptada al análisis de la incidencia del cambio climático sobre las personas.

Detectar y reducir la vulnerabilidad de las personas ante el CC desde una perspectiva humana atendiendo a las intersecciones, transversalidad, equidad e inclusividad.

Como se ha apuntado ante la envergadura de hacer una aproximación a los efectos del CC en la población, se propone una Metodología de Impacto del CC sobre las personas. Esta permitirá construir una Matriz de Vulnerabilidad Climática que se traslade a un diagnóstico gráfico en forma de Mapa de Vulnerabilidad Climática. Ambas herramientas, la matriz y el mapa, se nutren entre sí y se dotan de contenido en función del análisis de los efectos del CC en la población y de una serie de indicadores que permitan calibrar y establecer parámetros que pongan el foco en los grupos de incidencia más vulnerabilizados frente al CC.

Figura 6. Esquema Metodología Impacto Climático sobre las Personas. Elaboración propia

La Metodología del Impacto del Cambio Climático sobre las Personas creada para esta Guía orbita sobre dos puntos de arranque que son:

  1. El análisis de los Impactos derivados del cambio climático en las persona, en sus vidas en el territorio canario. Estos efectos pueden ir desde el deterioro de la salud física y mental, incremento de situaciones de violencia, elevación de los índices de mortalidad a daños y/o pérdidas en viviendas entre otros aspectos.

https://www.lancetcountdown.org/

 

  1. Indicadores que muestran qué aspectos de la vida de las personas nos señalan con qué grado de vulnerabilidad o fragilidad se enfrentan al cambio climático, y sobre los que hay que actuar para reducir el impacto de la emergencia climátaica sobre ellas. Hay que señalar que los indicadores tradicionales, más usados, en muchos casos, no tienen la calidad pertinente debido principalmente a su falta de desagregación, temporalidad y escasa concreción territorial. De ahí que se proponga ampliar la información de la que se sustente la matriz de vulnerabilidad climática a:
    1. Indicadores procedentes de fuentes secundarias que hasta ahora se han venido utilizando, INE, ISTAC entre otras, con la exigencia de que amplíen la desagregación necesaria para que los datos se impregnen de la calidez y validez necesaria y, además, sirvan como diagnóstico y predictor. Esta desagregación, no hay que olvidarlo, al menos en relación al sexo, es ya un criterio impuesto por la Ley Para la Igualdad Efectiva entre mujeres y hombres de 2007.

Simultáneamente debe recurrirse y fomentarse la participación de la ciudadanía en los procesos de actuación ante el cambio climático. El conocimiento de las personas que transitan el espacio aporta un información cualitativa imprescindible para planificar y co-crear propuestas de mitigación y adecuación. Esta aportación trasciende los datos cuantitativos, y por ende contribuye a crear espacios de corresponsabilidad y empoderamiento de la población.

MATRIZ DE VULNERABILIDAD DE LAS PERSONAS ANTE EL CAMBIO CLIMÁTICO

META 1
Diseñar, a partir de la metodología de impacto del CC sobre las personas una Matriz de Vulnerabilidad.

Esta matriz se sustenta con indicadores y dimensiones de vulnerabilidad por un lado, y con el acercamiento a los grupos de incidencia con mayor grado de afectación por el CC en Canarias, por otro

Esta Metodología de Impacto del CC sobre las Personas (análisis de los efectos del CC sobre la población que reside en Canarias y propuesta de indicadores que enfoquen la mirada sobre los grupos de incidencia con mayor probabilidad de verse en mayor medida afectados) constituye la esencia de la Matriz de Vulnerabilidad, en adelante MVPCC y del Mapa de Vulnerabilidad de las Personas ante el Cambio Climático.

Figura 7. Esquema Matriz de Vulnerabilidad Climática. Elaboración Propia

El contenido de la Matriz de Vulnerabilidad de las Personas ante el CC se asienta en tres esferas de información interrelacionadas (que se desarrollarán más adelanten como Líneas de análisis). Por un lado identifica los grupos de incidencia más vulnerabilizados/fragilizados, los ámbitos o dimensiones de la vida de las personas que se verán más afectados por el CC y, en tercer lugar se incorpora una lista de impactos del CC en Canarias.

  • Grupos de incidencia o personas más vulnerabilizadas ante el CC. En esta categoría de observación se hace una aproximación a los principales colectivos o personas, que por sus circunstancias residenciales, demográficas, económicas, sociales… se encuentran en una coyuntura más vulnerable en general, y en particular con respecto al CC. Por ejemplo, las personas mayores.
  • Dimensiones de las vulnerabilidades humanas asociadas al CC. Bajo este epígrafe se agrupan aquellas parcelas de la vida de las personas que en alguna medida se están viendo dañadas por las repercusiones más adversas de la crisis climática. Por ejemplo, uno de los aspectos del CC que repercute en las personas mayores es la limitación de su vida en espacios abiertos, uso restringido de los lugares de socialización, actividad física/salud al aire libre (por, entre otros aspectos, el incremento de las temperaturas).
  • Impactos derivados del CC en las personas. Efectos del CC detectados y/o previsibles que pueden afectar a las condiciones en las que las personas desarrollan sus vidas.

Estas tres variables son las que van a dotar completar la matriz de vulnerabilidad tal y como se propone a continuación. La información que se recoja se deberá ajustar a la disponibilidad de los datos que ofrezcan las fuentes (INE, ISTAC, recursos estadísticos insulares, comarcales, municipales) y los recursos que en cada caso se puedan poner en marcha para enriquecerla a través de la participación ciudadana.

Para agilizar y hacer más accesible el uso de esta información entendemos que se debería contar con una base de datos tipo Access o similar que facilite tanto la toma de datos como el volcado de los mismos.

Figura 8. Modelo de Matriz de Vulnerabilidad Climática. Elaboración Propia

La propuesta es que a partir de los datos recogidos en la matriz se puedan trasladar en formato gráfico los diferentes niveles de vulnerabilidad detectados a un mapa que permita cruzar los distintos indicadores para cada una de las categorías tal y como se muestra en la siguiente Figura 10 y extraer una foto de las zonas más impactadas o susceptibles de serlo en base a las circunstancias de las personas que viven en ellas, el espacio que habitan y los impactos derivados del CC.

Figura 9. Mapa de Sensibilidad con respecto a las olas de calor. Atlas de Riesgos Climáticos.
Ministerio del Medioambiente de Chile

MAPA DE VULNERABILIDAD DE LAS PERSONAS ANTES DEL CC

Se pretende crear un marco de contenidos que permita, para cada uno de los territorios y de las dimensiones generar una una imagen gráfica a modo de Mapa de Vulnerabilidad de las Personas ante el CC. En cada uno de los mapas se debe poder trasladar la información sobre los peligros derivados del CC con mayor grado de afectación local, por un lado, y por otro, los datos referidos a los indicadores de la matriz de vulnerabilidad relativos a las personas que transitan por ese espacio (grupos de incidencia).

Este Mapa de Vulnerabilidad de las Personas ante el CC se rediseña a partir de otros instrumentos que se han venido trabajando, por ejemplo, desde la administración pública española. El traslado de los datos del Mapa de Vulnerabilidad de las personas ante el CC a un plano adaptado a cada territorio permite tener en formato gráfico diversas capas que visibilicen los focos de mayor vulnerabilidad social asociados al CC. Como se muestra en la siguiente Figura 11 se superponen capas en las que se observan dimensiones que pueden verse concernidas por el impacto climático y agravadas por las condiciones del entorno y las circunstancias en las que viven las personas. En suma con este instrumento se pretende identificar, entre otros, los siguientes factores:

  • Condicionantes en la ordenación del territorio y la planificación urbana, mediante la caracterización previa de áreas o elementos vulnerables.
  • Barrios o entornos urbanos que presenten un mayor grado de vulnerabilidad social, económica y ambiental como áreas de actuación preferente para favorecer la equidad en el desarrollo urbano y luchar contra las bolsas de pobreza, la exclusión social y la desigualdad.
  • Sectores o servicios que presentan un mayor grado de vulnerabilidad social y económica frente al CC.
  • Hogares/viviendas/administraciones en situación de pobreza energética.
  • Riesgos de exclusión social por género, edad, país de origen o cualquier otro rasgo entendido como discriminatorio.

Se puede consultar, en el ámbito español, la web del Observatorio de la Vulnerabilidad Urbana del Ministerio de Fomento en la que encontrar recursos útiles como el “Atlas de Vulnerabilidad Urbana” con información municipal aunque con datos censales referidos al censo de Población y Vivienda de 2011.

En esta contexto la formula es avanzar en el análisis de indicadores que incluyan otros elementos que afectan a la vida de las personas y que están interconectados. Áreas de conocimiento como la movilidad y la accesibilidad, la biodiversidad y el territorio, el metabolismo territorial, la economía, la relación con el entorno construido confluyen y condicionan dialécticamente en cómo la población vive e interactúa entre sí y con el entorno.

Figura 10. Atlas de vulnerabilidad urbana. Ministerio de Fomento

De tal manera, entendemos que contar con una herramienta como esta, adaptada a cada uno de los espacios sobre los que planificar, ordenar un territorio, facilita la elaboración de estrategias, acciones, presupuestos y esfuerzos municipales y regionales, para mitigar el impacto del CC en las personas o grupos de incidencia más vulnerables y en peores condiciones de partida.

Figura 11. Mapa de Resiliencia con respecto a las olas de calor. Atlas de Riesgos Climáticos.

Ministerio del Medioambiente de Chile

DATO INFORMATIVO:

  • Canarias se sitúa, según datos del INE, en el segundo lugar de todo el territorio
    español según porcentaje más alto de población en riesgo de pobreza o exclusión
    social (tasa AROPE): Canarias (36,3%), tras Extremadura (38,7%).
  • Canarias ocupa el tercer lugar en cuanto al nivel de ingresos medios anuales másbajos de todo el estado: Canarias (9.935 euros), tras Extremadura y Región de Murcia (entre 9.147 y 9.850 euros). INE