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- TPB – Territorio, Paisaje y Biodiversidad
- TPB.1 EJE 1. Ecosistemas naturales
- TPB.1.2 Línea 2: Vulnerabilidad de los ecosistemas y riesgos naturales
Aunque el buen funcionamiento de los ecosistemas naturales es esencial para la supervivencia humana, la biodiversidad canaria se encuentra comprometida por las presiones derivadas del cambio climático antropogénico, la expansión urbana, la sobreexplotación de recursos y la contaminación.
En las próximas décadas se espera que este fenómeno incremente el estrés ambiental que soportan los ecosistemas y se teme que muchos de ellos no sean capaces de adaptarse. Las respuestas biológicas ya son observables y están ocurriendo en diferentes ambientes (terrestres y marinos) y a múltiples niveles: temporal (fenología), espacial (distribución geográfica) y de organismo (fisiología). Consecuentemente será primordial que se evalué con un mayor detenimiento los impactos previsibles del cambio climático sobre la biodiversidad canaria, y se contemplen diferentes escenarios en el territorio. Esto permitirá a los equipos redactores establecer un modelo territorial y/o un planeamiento urbanístico coherente y sostenible basado en criterios científicos.
En términos generales, la vulnerabilidad de los ecosistemas, los hábitats y las especies dependen de su sensibilidad y resiliencia a los cambios. En este sentido, la variabilidad natural del clima, con la impredictibilidad de sus precipitaciones y su régimen de perturbaciones (sequías, inundaciones, incendios forestales,…) determinan las características y resiliencia de los ecosistemas (véase epígrafe introductorio Una alarma latente). La celeridad del cambio climático antropogénico, unida a la presión del ser humano sobre los ecosistemas, deja muy poco margen temporal desde una visión biológica, para que las especies se adapten y se reajuste los ecosistemas.

Figura 20. Estudio predictivo de la distribución de los pisos de vegetación en Tenerife para diferentes escenarios del cambio climático. Fuente: Principales retos para la conservación de la biodiversidad frente al impacto del cambio climático en la isla de Tenerife (J. L Martín Esquivel, 2020). Disponible en: www.conferencia.lifeshara.com.
DATO INFORMATIVO:
Por cada grado que aumente la temperatura, las especies tienden a aumentar 167m de altitud de media, en su rango de distribución. (José. L. Martín Esquiven, 2020).
En base a lo descrito anteriormente, en muchas ocasiones las estrategias de cambio climático tienden a no considerar la variabilidad socioecológica generada por el régimen natural de perturbaciones y proponen políticas con beneficios a corto plazo o basadas en soluciones tecnológicas que reducen la resiliencia de los ecosistemas, como por ejemplo, obras hidráulicas para controlar la variabilidad hidrológica. (Atauri Mezquida et al., 2018).
Por este tipo de razones, resulta imprescindible entender los efectos del cambio climático y los aspectos que hacen a los sistemas naturales vulnerables, para que de manera sistémica, se pueda llevar a cabo una ordenación territorial que integre la Adaptación basada en los Ecosistema (AbE), alejándose de criterios a corto plazo y que en gran parte de los casos, retroalimentan la mala adaptación.
La presente línea de análisis busca enfocar la evaluación de los riesgos de los ecosistemas frente a los efectos del cambio climático y aportar pautas para, desde la ordenación del territorio, potenciar la resiliencia de los ecosistemas canarios.
El implementar las Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN) supone una gran oportunidad para reorientar el modelo territorial, la planificación urbanística y la gestión sistémica del riesgo de desastre frente a los efectos del cambio climático.

Figura 21. Charca de Maspalomas (Proyecto MASDUNAS) ejemplo de una intervención que contempla Soluciones de adaptación basadas en la Naturaleza (SbN) basadas en criterios científicos. Fuente: (M.A. PEÑA) www.masdunas.es.
Pero no es solo la vulnerabilidad de los sistemas naturales la que depende de los sistemas humanos, también ocurre a la inversa. El nivel de riesgo de los sistemas humanos está íntimamente ligado al estado de conservación de los ecosistemas. Un ejemplo tipo puede ser un núcleo costero, que será menos vulnerable a las avenidas si cuenca arriba se mantienen en buen estado de conservación ambiental los procesos como la infiltración de agua de escorrentía en el suelo y los ecosistemas, capaces de ofrecer el servicio de regulación de flujos de agua y protección frente a las inundaciones.
Asimismo se sugiere buscar soluciones para evitar la fragmentación de los hábitats, muchos de ellos presionados no solamente por el cambio climático, sino también, por las actividades antrópicas que se desarrollan en múltiples puntos de la costa canaria. Por lo tanto, la evaluación de la vulnerabilidad frente el cambio climático, tanto desde el punto de vista natural como social y económico, es necesaria para priorizar las medidas de adaptación, las cuales son un pilar esencial para el desarrollo sostenible del archipiélago.

Figura 22. Hábitats fragmentados por el proceso urbanístico de Costa Calma y la red viaria de la FV-2 (Pájara, Fuerteventura). Fuente: IDE Canarias, Hábitats de Interés Comunitario 2016.

Figura 23. Balanconal de Costa Calma en peligro de desaparecer si se mantiene la configuración urbana actual, que supone una barrera arquitectónica que no permite el retroceso de este hábitat frente al incremento del nivel medio del mar. Fuente: La Provincia.
Consecuentemente, la ordenación territorial y las intervenciones urbanísticas pueden ser unas poderosas herramientas para contribuir activamente a prevenir, minimizar y eliminar las especies exóticas invasoras (véase Guía de Actuación para los Gobiernos Locales en relación con las Especies Exóticas Invasoras).
META 1.
Fortalecer de manera sistemática los ecosistemas naturales más vulnerables al cambio climático.
Se espera que el cambio climático incida negativamente y de manera incisiva en los ecosistemas canarios, generando múltiples impactos tanto en los hábitats terrestres como en los marinos. La tendencia del Archipiélago hacia un clima más cálido y árido, unido al incremento de fenómenos meteorológicos extremos, potenciará la erosión del suelo y el aumento de los incendios forestales. Estas nuevas condiciones también favorecerán la proliferación de plagas y de especies invasoras que competirán contra las especies autóctonas, poniendo en peligro nuestra rica biodiversidad.

Figura 24. Rabo de gato (Pennisetum setaceum), especie vegetal altamente invasora e invasiva que aprovecha la red viaria y los cauces de barrancos para propagarse. Fuente: Web de la Reserva de la Biosfera Macizo de Anaga.
Frente a este escenario, resultará fundamental gestionar los espacios naturales de las islas contemplando su vulnerabilidad frente al cambio climático y considerando la presión antrópica, tanto la actual como la futura (se propone reflexionar sobre la merma de los recursos naturales frente a un clima extremo e inestable). Del mismo modo, estos espacios bien gestionados supondrán valiosos escudos que reforzarán la capacidad adaptativa de la sociedad frente al cambio climático.
“La adaptación al medio ambiente y la reducción del riesgo de desastres están estrechamente vinculadas, pero no son lo mismo”
Consecuentemente, el propósito de la presente línea de análisis es detectar cuáles son los hábitats vulnerables presentes en un Plan y qué soluciones pueden aplicarse priorizando las Soluciones basadas en los Ecosistemas (véase TPB.4.1 Línea 1: Las Soluciones basadas en la Naturaleza).
Construyendo la resiliencia de los ecosistemas frente al cambio climático
A continuación, la Guía facilita un enfoque metodológico a través de varias fases que pueden integrase en un Plan para evaluar la vulnerabilidad de los ecosistemas frente al cambio climático, con el propósito de crear sinergias positivas que fortalezcan la capacidad de resistencia de los hábitats, y a su vez, monitorizar de manea continua el proceso:

| INFORMACIÓN | DIAGNÓSTICO | MODELO | INDICADORES |
| FASE 1 | FASE 2 | FASE 3 | FASE 6 |
| FASE 6 | FASE 3 | FASE 4 | – |
| – | – | FASE 5 | – |
Figura 25. Fases para evaluar la vulnerabilidad de los ecosistemas frente al cambio climático. Fuente: Elaboración propia.
ASPECTOS CLAVE DE ANÁLISIS Y DIAGNÓSTICO de la Meta 1: Actuar en los ecosistemas naturales más vulnerables al cambio climático.

Figura 26. Puntos de partida que pueden considerarse a la hora de estudiar la vulnerabilidad de los ecosistemas presentes en un Plan. Fuente: Elaboración propia.
Elementos o conceptos clave de la meta 1:
Retroalimentación ecológica positiva, Resiliencia de los ecosistemas, Equilibrio de los Servicios Ecosistemáticos, cambios en las características climáticas, alteración de la funcionalidad y estabilidad de los hábitats, vulneratibilidad de los ecosistemas, especies invasoras/invasivas, presión antrópica, grandes incendios forestales, desertización/desertificación, subida del nivel medio del mar.
Ante una amenaza global sin precedente en la historia de la humanidad, resulta fundamental integrar el cambio climático y la degradación del sistema natural en el planeamiento. No considerar dicha perspectiva puede acarrear desajustes en la materialización del Plan, provocando por ejemplo, el incremento de la vulnerabilidad de los ecosistemas, el aumento de los costes de las intervenciones, la disminución de de la respuesta frente a los riesgos derivados del cambio climático, etc.

Figura 27. Las Lagunillas (Isla de lobos), con ecosistemas altamente vulnerables al cambio climático.
Items de análisis.
Conocer la situación actual
- Alteración de la vulnerabilidad y estabilidad de los ecosistemas.
- Especies autóctonas.
- Especies exóticas presentes en el ámbito del Plan.
- Riesgos naturales.
- Subida del nivel medio del mar.
La Guía es consciente de que en la actualidad el conocimiento científico y la divulgación pública que incorpora la incidencia del cambio climático sobre los múltiples ecosistemas canarios es limitada, por lo que se facilita una serie de herramientas y elementos de consulta que pueden ayudar a los equipos redactores a enfocar la evaluación de la vulnerabilidad de los ecosistemas:
Tabla 7. Herramientas de información que pueden ayudar a determinar los riesgos de los ecosistemas frente al cambio climático.
Fuente: Elaboración propia.
Diagnóstico
Necesidades de actuación
- Vulnerabilidad de los ecosistemas y/o especies considerando los potenciales impactos del cambio climático.
- Especies autóctonas vulnerables.
- Potencial de la aparición de especies exóticas invasoras/invasivas.
- Cambios en la funcionalidad y estabilidad de los ecosistemas.
- Desertización – desertificación.
- Presión antrópica actual y considerando la sobreexplotación de los recursos derivados por un clima variable e inestable.
Una vez localizadas las áreas con ecosistemas relevantes, se propone identificar en el diagnóstico las causas que ocasionan el desequilibrio del sistema natural o el potencial a experimentar algún impacto tanto por la presión del ser humano, así como del cambio climático. Para ello, será necesario categorizar cuáles serán los riesgos inmanejables (por ejemplo, la subida del nivel medio del mar), y qué riesgos pueden tener una solución antrópica, para neutralizar su incidencia, o al menos reducirla y dar cierto margen de adaptación a los ecosistemas.
Sería conveniente que dentro de estos últimos, se realice una categorización en la que se contemple el grado de vulnerabilidad, dando pistas de las prioridades a la hora de proponer las diferentes alternativas de un Plan.

Figura 28. Factores que pueden integrarse en el diagnóstico considerando la desertización y/o desertificación en el ámbito de un Plan. Fuente: elaboración propia.
Dada la insuficiente información relacionada con la vulnerabilidad de los ecosistemas canarios frente al cambio climático, será clave crear puentes de conocimiento científico para que los equipos redactores tengan una visión real y objetiva de la situación actual, y así desplegar un modelo coherente y útil para salvaguardar nuestros hábitats frente a esta amenaza global.
Indicadores.
Evaluación-ordenación-seguimiento
Es necesario analizar y vigilar los ecosistemas, buscando desde el origen cuales son las causas que originan sus desequilibrios. A continuación se propone una serie de indicadores que pueden ayudar a identificar las causas de su vulnerabilidad, y a su vez, permiten realizar el seguimiento considerando las actuaciones llevadas a cabo por el Plan:
Tabla 8. Resumen de los indicadores cualitativos y cuantitativos del eje de integración TPB1.1 Vulnerabilidad de los ecosistemas y riesgos naturales.
Fuente: Elaboración propia.
| INDICADORES | CRITERIOS DE ORDENACIÓN | EVALUACIÓN DIAGNÓSTICO |
MODELO | SEGUIMIENTO | TIPO DE INDICADOR | ||
|---|---|---|---|---|---|---|---|
| UMBRAL MÍNIMO | UMBRAL DE SOSTENIBILIDAD | ||||||
| TPB-IND.08 | Vulnerabilidad e impactos en el sistema natural | – | No tener ecosistemas vulnerables en el territorio. |
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|
Primario |
| TPB-IND.09 | Grado de ocupación de áreas naturales vulnerables | – | – |
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Primario |
Medidas y recomendaciones.
Para la ordenación y ejecución.
- (A). Identificar, cartografiar y realizar un seguimiento de los ecosistemas y biodiversidad más vulnerables al cambio climático y a la presión antrópica.
- (A). Identificar, cartografiar y realizar un seguimiento de los impactos que el planeamiento pueda ocasionar sobre los ecosistemas y biodiversidad más vulnerables al cambio climático.
- (A). Limitar la ocupación de áreas altamente vulnerables a sufrir impactos asociados al cambio climático. Se puede considerar la compatibilidad de usos, como por ejemplo, áreas de recreo natural.
- (A). Considerando la participación ciudadana, se propone regular el pastoreo para reducir la alteración fisicoquímica de los suelos y la presión sobre la vegetación.
- (A). En el caso de llevarse a cabo actuaciones de sellado de suelo, se plantea trasladar el suelo con valor hacia espacios que presentan signos de erosionabilidad.
- (A). Es de vital importancia evitar en el ajardinamiento con vegetación potencialmente invasora/invasiva, no solamente consultando los catálogos de especies invasoras, sino también a través de la experiencia en otro ámbitos geógraficos.
(A= Adaptación)
Criterios
para la ordenación
- (A). Priorizar la utilización de vegetación autóctona para el ajardinamiento urbano.
- (A). Potenciar la conectividad ecológica del sistema rural y urbano con la natural, teniendo un control regular para evitar impactos negativos sobre hábitats de elevado valor ecológico.
- (A). Integrar en el Plan soluciones estratégicas que incrementen la resiliencia directa e indirecta de los ecosistemas.
- (A). Conservar los hábitats que son vitales para la conservación de especies, tanto animales como vegetales.
(A= Adaptación)

